Las hierbas culinarias frescas son una excelente adición a cualquier plato, dándole aroma y sabor. Cultivar albahaca, perejil y otras hierbas en casa no solo es económico, sino también conveniente, porque siempre tendrás verduras frescas a mano.
Consideremos las reglas básicas para cultivar hierbas culinarias en casa.
Selección y preparación de hierbas para cultivar en casa.
Algunas hierbas se adaptan fácilmente al cultivo en casa, en particular:
- Albahaca
- Perejil
- Eneldo
- Menta
- Romero
- Tomillo
Estas plantas son fáciles de cultivar en macetas o contenedores pequeños. Crecen rápidamente, no tienen pretensiones y requieren un cuidado mínimo, lo que las convierte en una opción ideal incluso para principiantes.
Cómo empezar a cultivar hierbas en casa: instrucciones paso a paso
- Selección de macetas y preparación del suelo
Elija una maceta separada o un recipiente grande para cada planta para dejar suficiente espacio para que crezcan las raíces. La tierra debe ser una mezcla para macetas ligera que proporcione un buen drenaje y permeabilidad al aire. - Sembrar o plantar plántulas
La mayoría de las hierbas se pueden cultivar tanto a partir de semillas como de plántulas. Si elige semillas, plántelas a una profundidad de aproximadamente 0,5-1 cm y riegue ligeramente. Las plántulas se pueden plantar directamente en el suelo preparado. - Ubicación
La mayoría de las hierbas culinarias necesitan mucho sol, por lo que es mejor colocarlas en el alféizar de una ventana al sur o al suroeste, donde recibirán entre 6 y 8 horas de luz solar al día. - Riego
El césped se debe regar con regularidad, pero de forma moderada, sin dejar que se seque ni se humedezca demasiado. La mejor regla general es regar cuando la capa superior del suelo se sienta seca al tacto. - Fertilizantes
Las hierbas no necesitan mucho fertilizante, pero una vez al mes puedes alimentarlas con una solución orgánica o fertilizantes especiales para verduras.
Peculiaridades del cuidado de diferentes tipos de hierbas.
- Albahaca
La albahaca necesita calidez y luz, conviene protegerla de las corrientes de aire. Para que la albahaca siga creciendo exuberantemente, pellizque periódicamente la parte superior y retire los botones florales. - Perejil
El perejil es menos exigente y puede crecer con menos luz. Riégala con moderación y mantenla en un lugar fresco. El perejil puede crecer hasta dos años y dar hojas verdes incluso en invierno. - A Mint
Mint le gusta el riego abundante y la sombra parcial, por lo que se puede cultivar incluso en lugares ligeramente sombreados. Tiene la capacidad de crecer, por lo que se le puede asignar un contenedor separado. - Romero
El romero necesita un lugar bien iluminado y un suelo ligero. Se debe regar raramente, evitando el exceso de humedad. Una vez al mes puedes alimentar con una solución fertilizante débil. - Eneldo El eneldo
crece rápidamente, pero necesita mucha luz solar. Para obtener una cosecha abundante, riégala regularmente y aliméntala con fertilizantes orgánicos. - Tomillo Al
tomillo, al igual que el romero, le gusta el sol y tolera bien la sequía. Se debe regar moderadamente para evitar que las raíces se pudran.
Consejos de cuidado
- Pellizcar : para obtener más masa verde, es necesario pellizcar la hierba periódicamente. Esto estimula a las plantas a formar nuevos brotes.
- Limpieza : retirar las hojas viejas y amarillentas para que la planta tenga un aspecto saludable y no desperdicie energía apoyando partes sobrantes.
- Gira la maceta : gira la maceta hacia la luz desde diferentes lados para que las plantas se desarrollen uniformemente y no tiren en una dirección.
Cultivo de hierbas culinarias: ventajas y beneficios.
Las hierbas culinarias frescas no sólo realzan el sabor de los platos, sino que también contienen muchas sustancias útiles, como vitaminas A, C, K y antioxidantes. El cultivo casero también garantiza la ausencia de fertilizantes químicos y permite controlar el proceso de cuidado de las plantas. La vegetación decora el interior de la cocina, crea comodidad y acerca la naturaleza incluso en condiciones urbanas.
La albahaca, el perejil, el romero y otras hierbas son fáciles de cultivar en casa gracias a unos sencillos cuidados. No sólo aportan sabor y aroma a los platos, sino que también disfrutan de la cosecha fresca, que siempre está a mano.