Aprender a lavar un radiador es una tarea común que debería ser la máxima prioridad en su lista de tareas pendientes si tiene problemas con la calefacción o si la enciende por primera vez este año. Si su radiador no calienta cuando finalmente enciende el interruptor de la calefacción central para mantener su hogar caliente en el invierno, deberá apagar el radiador o lavarlo. Las señales de que necesita lavar el radiador incluyen puntos fríos en la parte inferior del radiador, es posible que escuche ruidos extraños de gorgoteo provenientes de las paredes o que sus esfuerzos le hayan regalado un líquido marrón.
Esta tarea no sólo puede mantener sus radiadores en óptimas condiciones, sino que incluso puede ahorrar energía en su hogar. Si no descarga los radiadores, podría significar que está pagando facturas de calefacción más altas por radiadores ineficientes que no calientan su hogar adecuadamente. Con el aumento del coste de la electricidad, esto es lo último que necesita cualquier propietario.
Pero sabemos lo que estás pensando. ¿Por qué lavar el radiador y cómo?
¿Por qué debería lavar el radiador?
Enjuagar el radiador simplemente significa hacer pasar agua dulce a través del calentador para limpiarlo y eliminar la acumulación de lodo y suciedad que le impide hacer su trabajo correctamente.
El lodo consiste en partículas de polvo mezcladas con incrustaciones que circulan por todo el sistema de radiadores. Esto suele ocurrir cuando su radiador es muy viejo o no ha recibido el mantenimiento adecuado.
A medida que se acumula lodo, ejerce presión sobre la caldera y puede ser una de las principales causas de fallas de la caldera. Sin embargo, al lavar el radiador, puede deshacerse de esta acumulación, lo que garantiza una distribución uniforme del calor y ayuda a que su hogar se caliente de forma rápida y eficiente.
Cómo lavar el radiador
Los aficionados al bricolaje podrán lavar los radiadores de su propia casa siguiendo nuestra sencilla guía de 10 pasos a continuación.
Si no te sientes cómodo haciendo el trabajo tú mismo, busca siempre la ayuda profesional de un especialista.
1. Consigue el equipo adecuado
Para lavar el radiador, asegúrese de tener las siguientes herramientas:
• Tecla para bombear el radiador
• Martillo de goma
• Llave inglesa
También necesitarás sábanas y/o toallas viejas para limpiar el lodo o el agua que salga del radiador, y un balde para recoger el agua y la suciedad cuando drene el agua del sistema de calefacción.
2. Apagar la calefacción
A continuación, debes apagar la calefacción y dejar que el radiador se enfríe para no quemarte.
Espere una hora y media para que los radiadores se enfríen adecuadamente después de apagarlos.
Es importante que no te saltes ni te apresures en este paso. Si no espera a que el radiador se enfríe por completo, podría recibir una lluvia de lodo hirviendo.
3. Apague las válvulas.
Desconecte el radiador del resto de la calefacción central cerrando las válvulas en ambos extremos del radiador.
Para hacer esto, apague manualmente la TRV (válvula termostática del radiador) girándola en el sentido de las agujas del reloj o hasta la posición «0».
Para cerrar la válvula de cierre, deberá quitar la cubierta de plástico y luego usar una llave para girar la válvula completamente en el sentido de las agujas del reloj.
Tenga en cuenta cuántas vueltas se necesitaron para cerrar la válvula de cierre, ya que deberá girarla hacia el otro lado la misma cantidad de veces cuando vuelva a colocar el radiador en la pared.
Luego use una llave para aflojar la tuerca que conecta el radiador al TRV.
4. Usa un balde para drenar el agua.
Es posible que gotee agua del TRV, así que coloque un balde debajo para recoger el exceso de líquido. Luego use la llave de purga del radiador para abrir la válvula de purga y eliminar la presión de aire. Una vez que se haya eliminado todo el aire, el agua debería comenzar a salir por la válvula de salida.
5. Drene el radiador
Espere hasta que se haya drenado toda el agua del TRV, asegurándose de que se haya eliminado todo el lodo y el agua sucia. Luego afloje la tuerca de la válvula de cierre con una llave e incline el radiador para recoger el agua de ese lado. Después del drenaje, cierre la válvula de escape con la llave de liberación de aire.
6. Retire el radiador de la pared.
Ahora retire el radiador de la pared y muévalo afuera, donde pueda lavarse con una manguera.
Este es un trabajo complicado, así que asegúrese de cubrir las entradas del radiador con una toalla o bolsas de plástico cuando lo transporte por la casa, ya que es probable que quede agua sucia y lodo en el interior.
Pídele a un amigo que te ayude a mover un radiador potencialmente pesado al exterior para evitar lesiones.
7. Enjuague el radiador
Para eliminar la suciedad que queda en el radiador, debe conectar una manguera a la entrada de la válvula del radiador y abrir la válvula a su máxima capacidad. El flujo de agua limpia que lava el radiador y sale por la otra entrada debería arrastrar consigo todos los lodos.
Utilice su mazo de goma para golpear el radiador y eliminar cualquier acumulación de lodo restante. Repita este proceso conectando la manguera a la entrada de la válvula en el otro extremo del radiador para eliminar la mayor cantidad de lodo posible hasta que el agua salga limpia.
8. Vuelva a conectar el radiador.
Después de la limpieza, vuelva a colgar el radiador en la pared, vuelva a apretar las tuercas y abra ambas válvulas, recordando girar la válvula de cierre el mismo número de veces que lo hizo al retirar el radiador. Abra la válvula de escape con una llave del radiador para permitir que el aire atrapado escape del respiradero.
9. Comprobar la presión en la caldera.
Desconectar el radiador puede hacer que la caldera baje de presión, por lo que es posible que tengas que recargarla nuevamente.
La presión de la caldera debe ser de 1 a 1,5 bar. Si la presión cae por debajo de 1, deberá volver a presurizar el sistema con un circuito de llenado externo. Consulte siempre el manual del fabricante de la caldera para obtener consejos sobre cómo represurizar el sistema de la caldera.
10. Vuelva a encender el sistema de calefacción.
Después de completar todos los pasos anteriores, vuelva a encender el sistema de calefacción y verifique si todo funciona correctamente.
preguntas frecuentes
¿CUÁNTO COSTARÁ CONTRATAR A UN PROFESIONAL PARA LAVAR RADIADORES?
Una limpieza completa del sistema de calefacción costará aproximadamente entre 7.000 y 10.000 grivnas para una casa media con seis radiadores. Si decide contratar a un plomero profesional, lo más probable es que enjuague el sistema químicamente para eliminar la obstrucción utilizando un equipo especial.
¿CÓMO EVITAR LA ACUMULACIÓN DE SEDIMENTOS EN EL SISTEMA?
Agregue más inhibidores al sistema de calefacción. Este es un tratamiento químico que descompone las partículas no deseadas en el sistema de calefacción. Asegúrese de controlar los niveles de inhibidor y complementar según sea necesario.
¿ES POSIBLE LAVAR LOS RADIADORES USTED MISMO?
¡Sí tu puedes! Sin embargo, es importante tener en cuenta que siempre debe seguir las instrucciones anteriores lo más estrictamente posible y mantenerse seguro usted y su hogar. Lavar los radiadores puede ser una tarea desagradable y requiere mucha atención y cuidado. Así que asegúrese de proteger el área alrededor del radiador colocando toallas o sábanas viejas en el piso.
También debes recordar lavar el radiador hasta que el agua salga limpia. Esto puede llevarle más tiempo del esperado, pero es importante hacer el trabajo minuciosamente para mantener la calefacción central funcionando de la manera más eficiente posible.
Sin embargo, si todo esto parece un poco complicado, lo mejor será llamar a un profesional. El lavado del radiador implica enviar un potente chorro de agua a través del sistema de calefacción central para eliminar lodos, óxido o residuos. Sin embargo, este puede ser un trabajo complejo y le sugerimos que se comunique con un ingeniero registrado en seguridad de gas para asegurarse de que se realice de manera correcta y segura.
¿CON QUÉ FRECUENCIA SE DEBEN ENJUAGAR LOS RADIADORES?
Los expertos recomiendan lavar los radiadores cada 5-6 años para evitar la acumulación de exceso de lodo. Por supuesto, no hay nada de malo en lavarlos con más frecuencia para mantenerlos en óptimas condiciones, pero no es necesario.
También es una buena idea lavar los radiadores cuando se muda a una casa nueva, especialmente si no está seguro de cuándo se lavaron por última vez. Más vale prevenir que lamentar cuando se trata de su calefacción central y esto le dará la tranquilidad de saber que sus radiadores funcionan de la manera más eficiente posible.