Una cama puede durar toda la vida, pero las sábanas no están hechas para durar. La ropa de cama puede durar varios años, dependiendo de la frecuencia con la que la uses y de tu rutina de limpieza. Sin embargo, mucho depende de la calidad de los materiales.
Al alternar juegos de sábanas y mantener un almacenamiento adecuado, puede proteger sus favoritas de signos visibles de decoloración y desgaste. Esto es lo que los expertos tienen que decir sobre cuánto dura la ropa de cama y consejos sobre cómo prolongar su vida.
Esperanza de vida de la hoja.
La ropa de cama suele tener una vida útil de 2 a 5 años, dependiendo del cuidado, el tejido y el material.
Ciertas sábanas de lujo, como el algodón egipcio, pueden durar 10 años o más. La vida útil de tus sábanas realmente depende de la calidad, el material, el uso y el cuidado. Si elige sábanas de alta calidad y las cuida adecuadamente según las instrucciones de cuidado, podrá tener ropa de cama confiable y duradera que le brindará muchas buenas noches de sueño.
Dado que la vida útil de una lámina depende de muchos factores, es mejor comprarla teniendo en cuenta el tiempo deseado. Algunas telas, como el lino y el poliéster, no resisten bien después de varios lavados y pueden comenzar a deteriorarse más rápidamente, por lo que es necesario reemplazarlas.
Al observar el material, el tejido y las pautas de cuidado al comprar, puede decidir si el precio se compara con el valor.
Factores que determinan la vida útil de una chapa.
Cuidado y limpieza: Cada juego de sábanas viene con unas instrucciones de cuidado que pocas personas leen. El tipo de detergente, el ajuste de temperatura y las instrucciones de secado pueden variar significativamente según el juego de ropa. Lo mejor es seguir los pasos recomendados para sacarle el máximo partido a tus sábanas.
Frecuencia de uso : Depende mucho de la frecuencia con la que duermas sobre las sábanas. Ya sea que viaje mucho o tenga muchos juegos de cama, su uso y la frecuencia con la que lave tendrán un gran impacto en la duración de sus sábanas.
Número de hilos: El número de hilos se refiere al número de hilos por pulgada cuadrada de tela. Este indicador juega un papel importante a la hora de determinar la calidad del tejido. Un número de hilos superior a 400 es bueno, pero puedes encontrar anuncios de hasta 2000. Es fácil pensar que cuanto mayor sea el número, mayor será la calidad. Sin embargo, la mayoría de los expertos en ropa de cama dicen que cualquier valor superior a 600 probablemente sea solo una estratagema para aumentar el precio; pocos notan la diferencia en la calidad del sueño.
Tipo de material: La ropa de cama está hecha de una variedad de materiales y la resistencia de las fibras determina su durabilidad. Los materiales sintéticos como el poliéster suelen durar entre dos y tres años, menos que sus homólogos naturales.
Las mezclas que combinan fibras naturales y sintéticas se encuentran entre estos extremos y ofrecen una vida útil intermedia de alrededor de tres a cuatro años con el cuidado adecuado.
Tejido: Un tejido más apretado crea una tela más suave y densa que puede soportar lavados y usos repetidos sin deshilacharse ni aflojarse. Los más comunes son los tejidos de lona. Espacian uniformemente los hilos horizontales y verticales para garantizar la misma tracción. Los tejidos que utilizan hilos más verticales producen una tela más sedosa como el satén, pero pueden provocar bolitas.
Formas de prolongar la vida útil de la ropa de cama.
Compre sábanas de calidad: Las sábanas de alta calidad tienen fibras fuertes que pueden soportar el uso, lavado y secado constantes. Entre las sábanas de mayor calidad se encuentran el bambú, el Tencel, el algodón, el percal, el satén y el lino. Los materiales naturales de alta calidad son los que más duran.
Cuidados adecuados: Con el tiempo, se acumula algún material en mal estado en las sábanas. Los ácaros del polvo, los alérgenos, los aceites corporales, la humedad, las células muertas de la piel y otros insectos que comen telas pueden robarle rápidamente su ropa de cama favorita. Siga las instrucciones del fabricante para mantener la limpieza, color y elasticidad de la lámina.
Almacenamiento adecuado: Cuando las sábanas no estén en uso, guárdelas en un lugar seco y con buena circulación de aire. Pruebe con un contenedor especial, una bolsa transpirable o un armario de lavandería bien ventilado. Para evitar que se ponga amarillento, cubra el área de almacenamiento con papel de fumar sin ácido. Tenga en cuenta que los recipientes de plástico cerrados pueden atrapar moho y humedad.
Utilice varios juegos: el lavado frecuente desgasta las sábanas rápidamente. Sin embargo, alternar entre dos o más juegos prolonga la vida útil de todos los juegos. Considere comprar más de un juego de sábanas y cambiarlas semanalmente. Esto puede garantizar una larga vida útil para cada conjunto.
Señales de que es hora de cambiar las sábanas
Después de ciclos regulares de uso y lavado, las fibras de las sábanas pueden comenzar a romperse y mostrar signos de desgaste. Pero, ¿cómo puedes saber exactamente cuándo es el momento de un nuevo set?
Recomendamos estar atento a los bordes deshilachados, la tela fina, la aparición de agujeros, los colores descoloridos y la acumulación: esas pequeñas bolitas esponjosas en la superficie de la tela. Las sábanas que alguna vez fueron suaves pueden sentirse ásperas o incómodas después de lavados repetidos, lo que puede afectar la calidad del sueño. Además de una reacción cutánea inexplicable, afirma, “los olores desagradables incluso después del lavado o la ausencia de un aroma fresco pueden indicar que las sábanas han pasado su fecha de caducidad.
De lo contrario, cualquier signo de coloración amarillenta, decoloración, decoloración, manchas persistentes, adelgazamiento de la tela y olor a moho u hongos significa que es hora de reemplazar incluso sus sábanas más queridas.