Muchos de nosotros preferimos alimentos saludables para vivir más tiempo, razón por la cual probablemente ha habido un gran interés en la dieta de la Zona Azul en el último año. La dieta se basa en los hábitos alimentarios de las personas que viven en las «zonas azules», o las cinco regiones del mundo con mayor concentración de personas mayores de 100 años: Okinawa, Japón; Cerdeña, Italia; Nicoya, Costa Rica; Icaria, Grecia; y Loma Linda, California. Pero Dan Buettner, el experto en longevidad que identificó por primera vez las zonas azules, ahora dice que no importa lo que comas si tu dieta no contiene suficiente fibra.
El 29 de diciembre, Buettner publicó en su página oficial de Instagram un fragmento de una entrevista con la presentadora del podcast Habits & Hustle, Jennifer Cohen. En el vídeo, un experto en longevidad explica que la mayoría de las personas no prestan atención a la fibra.
La dieta estadounidense estándar (patatas fritas, hamburguesas, chuletas de cerdo, pizza) casi no tiene fibra.
Según Büttner, el consumo de fibra afecta principalmente al intestino, que contiene «alrededor de 100 billones de bacterias». Lo único de lo que se alimentan estas bacterias saludables es de fibra.
Cuando comes suficientes alimentos fibrosos, las bacterias de tu intestino fermentarán esa fibra y producirán ácidos grasos de cadena corta (AGCC). Mantienen su sistema inmunológico en óptimas condiciones, controlan la inflamación y regulan su estado de ánimo.
De hecho, estudios recientes han demostrado que los SCFA desempeñan un papel importante en la salud y la prevención de enfermedades. Algunos de sus beneficios para la salud conocidos incluyen prevenir la enfermedad inflamatoria intestinal (EII), reducir la diarrea, reducir el riesgo de cáncer de colon, ayudar con el control del azúcar en la sangre, proteger la salud del corazón y mantener un peso saludable, según la publicación.
Por otro lado, no consumir suficiente fibra puede tener efectos nocivos.
Si sigues la dieta estadounidense estándar, matas de hambre a estas bacterias y éstas actúan en el revestimiento de tu intestino. A menudo sufres de intestino permeable. Es un desastre.
Las pautas dietéticas actuales sugieren que debes consumir 14 gramos de fibra por cada 1000 calorías que consumas. Pero según un estudio de 2017 publicado hoy, solo alrededor del 5 por ciento de la población sigue esta recomendación. Por el contrario, la mayoría de la gente consume sólo 16,2 gramos de fibra al día.
Algunas de las mejores fuentes de fibra dietética incluyen: frijoles y guisantes, verduras, frutas, cereales integrales y nueces.
Pero ten cuidado. Uno de los principales problemas que enfrentan las personas cuando intentan incluir más fibra en su dieta es aumentar su ingesta demasiado rápido.
Algunas personas deciden repentinamente aumentar su consumo de fibra de una sola vez y experimentan efectos secundarios como gases e hinchazón. Entonces dejaron de hacerlo.