Los electrolitos son minerales importantes que son fundamentales para diversas funciones corporales, incluida la contracción muscular, la función nerviosa y el equilibrio de líquidos. Sin embargo, consumir demasiados electrolitos puede tener un efecto negativo en el organismo.
En este artículo, veremos qué son los electrolitos, cuánto necesita cada día y si una ingesta excesiva de electrolitos puede ser demasiado buena para usted. También analizaremos los signos de desequilibrio electrolítico y brindaremos consejos de expertos sobre cómo mantener el equilibrio electrolítico adecuado para una salud óptima, independientemente de la edad y el nivel de actividad física. Continúe leyendo para obtener más información.
¿Qué son los electrolitos?
Los electrolitos son minerales que llevan una carga eléctrica cuando se disuelven en agua. Los electrolitos comunes incluyen sodio, potasio, calcio, magnesio, cloruro y fosfato. Estos minerales se encuentran en muchos alimentos y bebidas, incluidas frutas, verduras, productos lácteos y bebidas deportivas. Los electrolitos también están disponibles como suplementos y, a menudo, se utilizan para reemplazar los electrolitos perdidos durante la actividad física intensa o en casos de deshidratación.
¿Cuántos electrolitos necesitas?
La cantidad de electrolitos que necesita depende de varios factores, incluidos la edad, el sexo, el nivel de actividad y la salud general. Los adultos sanos deben intentar consumir alrededor de 1500 a 2300 miligramos (mg) de sodio, 2600 a 3400 mg de potasio, 310 a 420 mg de magnesio y 1000 a 1200 mg de calcio cada día. Puede obtener esta cantidad siguiendo una dieta equilibrada que incluya frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras.
Cada electrolito participa en diferentes funciones corporales. El sodio es uno de los electrolitos más importantes implicados en el mantenimiento del equilibrio de líquidos y la contracción muscular. Por tanto, los deportistas que sudan mucho necesitan más sodio que la cantidad diaria recomendada. El potasio también ayuda a regular el equilibrio de líquidos y la contracción muscular, y apoya la presión arterial. El magnesio participa en cientos de reacciones bioquímicas del cuerpo y es clave para la producción de energía. El calcio es necesario para la salud mineral de los huesos, la transmisión del sistema nervioso y la coagulación de la sangre.
¿Necesitas bebidas o suplementos electrolíticos?
Si bien las bebidas y los suplementos con electrolitos pueden ayudarle a mantenerse hidratado y con energía, no todo el mundo los necesita. Si realiza una actividad física vigorosa o prolongada que implique sudar profusamente, puede beneficiarse de las bebidas con electrolitos para ayudar a reemplazar los minerales perdidos. De manera similar, su proveedor de atención médica puede recomendarle suplementos si tiene ciertas afecciones médicas que afectan el equilibrio de electrolitos, como enfermedad renal, enfermedad de tiroides e insuficiencia cardíaca. Sin embargo, para una persona promedio que lleva una dieta bien balanceada, generalmente no es necesario consumir bebidas y suplementos con electrolitos, ya que puede obtener suficientes electrolitos comiendo alimentos integrales y bebiendo agua.
La persona promedio puede satisfacer sus necesidades de electrolitos y líquidos a través de la dieta y no necesita depender de bebidas o suplementos con electrolitos.
¿Se pueden consumir demasiados electrolitos?
Consumir demasiados electrolitos puede provocar un desequilibrio en el cuerpo. Esta afección se conoce como toxicidad de electrolitos y puede ocurrir cuando hay demasiado sodio (hipernatremia) u otros electrolitos en la sangre. Demasiado sodio puede tener efectos más negativos que otros electrolitos. La hipernatremia, o niveles altos de sodio, puede ser perjudicial para el cuerpo y provocar retención de líquidos, presión arterial alta, deshidratación, daño renal y problemas cardíacos.
Signos y síntomas
Los signos y síntomas de un desequilibrio electrolítico pueden variar mucho según el tipo de mineral. Según la ósmosis de Elsevier, los síntomas comunes de un desequilibrio electrolítico pueden incluir:
- náuseas
- fatiga
- temblor
- diarrea
- edema
- debilidad
- desconcierto
- dolores de cabeza
- constipación
- dolor abdominal
- calambres musculares
- arritmia cardíaca
Cada electrolito tiene su propio conjunto de signos y síntomas, pero tienden a superponerse y llevar a la misma conclusión de desequilibrio electrolítico. Por eso es importante prestar atención a los signos y síntomas del consumo excesivo de electrolitos, como aumento de la sed, deshidratación, debilidad muscular, convulsiones, náuseas, vómitos, hinchazón de las extremidades, cambios en el ritmo cardíaco, confusión y aumento de la presión arterial.
Demasiado potasio puede provocar palpitaciones, dificultad para respirar, náuseas o dolor en el pecho, mientras que demasiado sodio puede provocar náuseas, vómitos, debilidad muscular, sed extrema y confusión.
Tratamiento
Si cree que ha consumido demasiados electrolitos, debe comunicarse con su médico de inmediato. A veces, los líquidos y ciertos medicamentos pueden ayudar a equilibrar los niveles, pero la supervisión médica es importante para resolver de forma segura cualquier toxicidad por electrolitos.
Si consume electrolitos principalmente a través de una variedad de alimentos consumidos con moderación, es menos probable que coma en exceso. Si toma regularmente un suplemento de electrolitos o de hidratación, preste atención a la dosis programada y tenga en cuenta cómo se adapta al resto del día.
Preguntas frecuentes
- ¿El exceso de electrolitos puede elevar la presión arterial?
- ¿Cuántos electrolitos puedes beber al día?
- ¿Los electrolitos te hidratan más rápido que el agua?
La esencia
Aunque los electrolitos son esenciales para la hidratación, el rendimiento físico y otras funciones corporales, consumirlos en exceso puede provocar efectos adversos. En lugar de consumir suplementos de electrolitos con regularidad durante el día, tenga en cuenta su ingesta de electrolitos y su nivel de sed. Hable con su proveedor de atención médica antes de comenzar cualquier nuevo régimen de suplementos, especialmente si tiene una afección médica o está tomando medicamentos.