El otoño es la época perfecta para comer tubérculos abundantes y saludables como zanahorias, remolachas y chirivías. Estas verduras son ricas en vitaminas y minerales, ayudan a mantener la salud y la energía en la estación fría y también aportan matices brillantes a los platos.
Ofrecemos varias recetas que ayudarán a que el menú sea variado y rico en sabores otoñales.
1. Zanahorias al horno con miel y especias
Este plato es perfecto como guarnición o snack independiente, combina el dulzor de la zanahoria y la miel con ligeras notas de canela y romero picante.
Ingredientes:
- 500 g de zanahorias
- 2 arte. l. Miel
- 1 arte. l. aceite de oliva
- ½ cucharadita canela
- 1 cucharadita romero fresco o seco
- Sal y pimienta al gusto
Preparación:
- Precalienta el horno a 200°C.
- Corta las zanahorias en barras grandes y colócalas en una bandeja para hornear.
- Mezcla miel, aceite de oliva, canela, romero, sal y pimienta. Vierta esta mezcla sobre las zanahorias y mezcle bien.
- Hornea durante 25-30 minutos hasta que las zanahorias estén suaves y ligeramente caramelizadas. Servir caliente.
2. Sopa de puré de remolacha con jengibre
Esta sopa cremosa tiene un color intenso y un sabor curativo gracias a la remolacha y el jengibre. El plato es ideal para un almuerzo o cena acogedor.
Ingredientes:
- 500 g de remolacha
- 1 papa mediana
- 1 bulbo mediano
- 2 dientes de ajo
- 1 arte. l. aceite de oliva
- 1 cucharadita jengibre fresco rallado
- 1 litro de caldo de verduras
- Sal, pimienta al gusto
- Crema agria y hierbas para servir.
Preparación:
- Pelar y cortar en cubos las remolachas, las patatas y las cebollas.
- Calentar aceite de oliva en una sartén, agregar la cebolla y el ajo picados, sofreír hasta que estén tiernos.
- Agrega el jengibre, la remolacha y las patatas, cubre con caldo y cocina durante unos 30 minutos hasta que las verduras estén blandas.
- Licue la sopa con una licuadora hasta que quede suave, agregue sal y pimienta.
- Sirva con crema agria y verduras picadas.
3. Chirivía al horno con parmesano
Las chirivías tienen un sabor suave y dulce que se revela perfectamente durante el horneado. El queso parmesano le da al plato un toque picante.
Ingredientes:
- 500 g de chirivías
- 2 arte. l. aceite de oliva
- 50 g de parmesano rallado
- Sal, pimienta, tomillo seco al gusto.
Preparación:
- Precalienta el horno a 220°C.
- Limpiar la chirivía y cortarla en barras largas.
- Mezcle las chirivías con aceite de oliva, sal, pimienta y tomillo. Colóquelo en una bandeja para hornear.
- Hornea por 20 minutos, luego espolvorea con queso parmesano rallado y regresa al horno por otros 5 minutos, hasta que el queso se derrita y se dore.
4. Gratinado de patatas y remolacha
Este gratinado es perfecto como plato principal o guarnición. La combinación de patatas y remolachas le da al plato un rico sabor y color.
Ingredientes:
- 3 patatas
- 2 remolachas medianas
- 200 ml de nata (20% grasa)
- 100 g de queso rallado (cheddar o gruyere)
- 1 diente de ajo
- Sal, pimienta al gusto
Preparación:
- Precalienta el horno a 180°C.
- Cortar las patatas y la remolacha en rodajas finas.
- Mezclar la nata con el ajo picado, sal y pimienta.
- Coloque las patatas y las remolachas en capas en una fuente para horno, vertiendo crema sobre cada capa.
- Espolvorea con queso rallado y hornea durante 40-45 minutos hasta que se doren.
5. Puré de zanahoria y chirivía
Este puré brillante y tierno puede ser una excelente alternativa al puré de papas y combina bien con varios platos de carne y verduras.
Ingredientes:
- 400 g de zanahorias
- 400 g de chirivías
- 50 gramos de mantequilla
- Sal y pimienta al gusto
- Un poco de nata o leche (opcional)
Preparación:
- Pelar y cortar las zanahorias y las chirivías, hervir hasta que estén blandas.
- Escurrir el agua, agregar la mantequilla y picar las verduras hasta que quede suave.
- Agrega un poco de leche o nata para obtener una textura más cremosa. Sal y pimienta al gusto.
Consejos para cocinar tubérculos:
- Utilice verduras de temporada : Las hortalizas de raíz frescas del mercado tienen mejor sabor y textura.
- No se exceda con los condimentos : los tubérculos tienen un sabor dulce natural que se puede realzar con especias y hierbas ligeras.
- Combina diferentes tubérculos : de esta forma los platos tendrán una textura más interesante y un sabor más rico.
Los tubérculos de temporada no solo son sabrosos, sino también extremadamente útiles. Cocinando con zanahorias, remolachas y chirivías, crearás platos nutritivos que decorarán tu mesa otoñal y darán confort a cada comida.